No hay otra manera de ser y sentirnos Madres. MADRE es un título que no se obtiene en la universidad, ni en la escuela, pero que nos compromete de por vida en su ejercicio y permanente actualización.
Somos Madres cuando nuestro hijo (a) nos llama por primera vez, luego de 9 meses en el vientre y meses fuera de él, con espera paciente y repeticiones constantes. Ese primer MAMÄ, nos emociona hasta las lágrimas.
Si bien ser Mamá es una hecho biológico y de preservación de la especie humana.
Hay Mamás por decisión, cuando con o sin pareja, se apuesta por la adopción de otro ser humano.
En la Universidad algunas amigas profesoras han decidido ser madres por adopción. Decisión que les ha cambiado sus vidas y en su madurez, disfrutan de sus hijos y nietos.
Hay madres fallecidas, madres en la distancia, abuelas, madres en vientres subrogados, madrinas, tías, nanas y maestras que merecen nuestro reconocimiento en el Día de la Madre.
Aunque Madre hay una sola, la crianza de un hijo requiere el concurso de muchas voluntades.
Definitivamente, ser Madre es un título que se gana y aún en los años dorados un «Mami te amo» es el mejor regalo que podemos recibir de nuestros hijos.
Les comparto una foto con mis hijos María Alejandra (Mariale) y Carlos Eduardo. Ellos son mi orgullo y la confirmación de que con ellos todo es posible.
Hoy, un recuerdo muy especial a mi madre María Sofía (Mary), ejemplo de trabajo, honestidad y amor incondicional. A 12 años de su partida física, aun sigue con nosotros. FELIZ DÍA MAMÁ. TE EXTRAÑO Y TE AMO.
Imagen: Mary Plazas con María Alejandra y Carlos Eduardo en el aeropuerto de Barcelona-Anzoátegui.