Estudiantes universitario miembros de «Anzoátegui se restea» realizaron el pasado jueves 3 de noviembre un «juicio público» al Presidente Nicolás Maduro como cierre a la manifestación que culminó frente al Palacio de Justicia en Barcelona- Anzoátegui.

Los manifestantes argumentaron «Nosotros, venezolanos POR NACIMIENTO y domicilio. Víctimas de la desgracia que vivimos producto del afán desmedido de poder de quienes nos pretenden oprimir. Sobrevivientes de la delincuencia y la falta de medicinas, con nuestros estómagos, despensas y carteras tan vacíos como la conciencia del dictador, aquí reunidos declaramos a Nicolás Maduro culpable del delito de asesinato de los venezolanos que mueren cada 20 minutos en manos del hampa, de los miles que mueren cada día por falta de alimentos y medicinas» y… » de las lágrimas de esas miles de madres, así como las que lloran la partida de sus hijos buscando mejores oportunidades… de traición a la patria por entregar nuestra soberanía a Cuba y China…. de fraude a la nación por acabar con nuestra moneda y dar falso testimonio para llegar a la presidencia de la República siendo colombiano.

Los estudiantes condenaron al Presidente Maduro a la deportación a Colombia «donde nació y nunca debió salir, para así nosotros escoger un legítimo presidente al que si le duela Venezuela y nos saque de la profunda crisis que hoy vivimos”.

Garúa Díaz, dirigente regional de Voluntad Popular denunció la presencia de colectivos que los amenazaron con armas blancas y dispersaron la protesta en las afueras de la Universidad Gran Mariscal de Ayacucho. Estas acciones de los colectivos fueron repudiadas por los manifestantes quienes se movilizaban de manera pacífica.

Fuente: caraotadigital